Más del 27% de la ingesta calórica diaria en la población española corresponde a cereales y derivados. Es el resultado del estudio Ingesta, perfil y fuentes de energía en la población Española de la Nutrición (FEN) y que forma parte del estudio científico ANIBES. Este grupo de alimentos incluye en pan (11,6%), la bollería y pastelería (6,8%), los granos y harinas (4,5%), la pasta (3,6%) y los cereales del desayuno y barritas de cereales (1%).
Para llegar a estas conclusiones, los expertos analizaron a 2009 personas de entre 9 y 75 años, así como la energía aportada por un total de 16 grupos y 29 subgrupos de alimentos y bebidas.
A los cereales les siguen las carnes y derivados. Y el tercer lugar pertenece a los aceites y grasas, con el aceite de oliva en cabeza, al que siguen otros aceites y mantequilla, margarina y mantecas.
La leche y los productos lácteos constituyen el cuarto grupo en el que la ingesta calórica es de la leche en el 5%, los quesos el 3%, el yogurt y las leches fermentadas un 2,4% y otros lácteos el 1,5%. Finalmente, las frutas, los pescados y mariscos y las bebidas no alcohólicas. En este grupo, los refrescos con azúcar aportan el 2,0%, los zumos y néctares el 1,3% y otras bebidas sin alcohol el 0,3%, además de cafés, infusiones, bebidas para deportistas y energéticas, refrescos sin azúcar y agua.
La FEN lidera la investigación de la primera encuesta poblaciones que recoge datos antropométricos de ingesta calórica y hábitos de alimentación, y su interrelación con el gasto de energía y los patrones de actividad física de la población en España.
Es importante inculcar desde edades tempranas unos buenos hábitos alimenticios con tal de garantizar que en edades futuras no se desarrollen enfermedades relacionadas con la obesidad, el sobrepeso o la diabetes, una de los problemas de mayor incidencia en el mundo desarrollado por el exceso de azúcares y grasas y la poca o nula actividad física.